Requisitos, acreditaciones, estudios, centros y consejos
El incremento de drones y su aplicación profesional ha hecho necesario la regulación de la actividad y estudiar cómo ocupan el espacio aéreo, comenzando por regular su manejo, a través de la obtención de una licencia.
Así que, poseer la licencia, es requisito imprescindible para dedicarse al uso de drones de forma profesional y comercial y manejar aparatos de más de 2 kg de peso.
Otro detalle importante de poseer la licencia, es que debes de tener claro que no te habilita para usar drones de forma libre, sino que solo podrás pilotarlos a través de un operador u obtener los permisos necesarios para ser un operador oficial.
Si vas a trabajar para una empresa especializada en esta actividad, ellos estarán habilitados. Y si tu idea es montar una empresa de pilotos profesionales de drones, debes de realizar todos los trámites exigidos por la AESA (Agencia Estatal de Seguridad Aérea) que puedes leer aquí, y esperar a su aprobación.
Según Drone Spain, contamos ya con más de 3.000 operadores autorizados, aunque la gran mayoría son autónomos y microempresas en vías de expansión, fruto de visionarios que han visto un nicho de mercado.
En paralelo a la profesionalización del uso de drones, han surgido muchas escuelas y cursos de formación relacionadas con el pilotaje oficial y acreditado de drones.
Normalmente, se ofertas dos tipos de acreditaciones y debes elegir acorde a tus objetivos:
Debes matricularte en una academia especializada en esta actividad. Para realizar este procedimiento de forma exitosa, comprueba que la escuela o curso que vas a emplear para obtener la licencia es una escuela ATO.
Las escuelas ATO son aquellas acreditadas y homologadas por la AESA, institución encargada de regular toda aquella aeronave o dispositivo que irrumpe en el espacio aéreo, hasta los 150 Kg de peso.
Para comprobar tu idoneidad para ser piloto de drones, debes de obtener el certificado médico aeronáutico, que es obligatorio para optar a la licencia.
En el caso del certificado médico, podrás optar a dos modalidades:
Normalmente, los cursos de piloto de drones se componen de un módulo teórico, de sesiones prácticas y de diversos exámenes, similar a la formación que se realiza para obtener la licencia de ultraligeros.
Las partes teóricas se superan con exámenes tipo test y se basa en conceptos aeronáuticos, mecánica básica, normativa o cómo leer mapas.
Con una menor carga de horas que la parte teórica, el módulo práctico se realiza con una teoría básica, con horas de vuelo, la superación de un examen tipo de test y unos ejercicios prácticos marcados por el examinador.
La parte práctica también conlleva la habilitación del tipo de drones y aeronaves que se pueden manejar, y esto depende de lo que incluya la formación.
El modelo más empleado y que incluyen las licencias es el DJI Phantom 2. Habilitarse para más tipos de naves, si no han sido incluidas en tu certificación, supone pasar de nuevo otro examen práctico y las tasas que conlleve.
Evidentemente, para la actividad profesional es obligatorio contar con un seguro de responsabilidad civil para cubrir posibles daños y accidentes, cosa que dependerá del operador.
Por último, pilotar aeronaves por control remoto también exige que el dispositivo lleve una placa identificativa donde consten los datos técnicos, así como los datos del operador.
Si lo piensas, difiere poco de los procedimientos necesarios para manejar un vehículo particular.
Si consultas los principales motores de búsqueda, puedes encontrar muchas academias que ofrecen cursos específicos para el aprendizaje del manejo de drones y la obtención de la licencia.
Según datos oficiales, en España existen 74 escuelas de formación oficiales.
La empresa Aerocámaras Especialistas en Drones es una de las mejores opciones para tu formación, además de que también son fabricantes y operadores.
World Aviation - Drone Division es otra de las grandes empresas especializadas en formación para pilotos y con gran variedad de formaciones para diferentes especialidades, como para su uso audiovisual o para laborales de seguridad y vigilancia.
Te animamos a invertir tu tiempo y dinero es conseguir esta acreditación profesional, si cumples algunos de estos requisitos:
Es decir, que es un complemento a tu profesión. Por ejemplo, si eres un profesional de la producción audiovisual, de la robótica o la topografía, y controlar esta herramienta puede amplificar e innovar los medios que usas para tu trabajo y ofrecer servicios nuevos.
Por tanto, tendrás un CV y perfil profesional más competitivo y con el que ofreces algo novedoso y atrayente.
Ojo, si en tu empresa necesita profesionales con este tipo de licencia, negocia sobre la posibilidad de que sean ellos quienes cubran los gastos, o parte de ellos, de la formación necesaria para obtener la licencia.
Si tu objetivo es emprender y montar un nuevo negocio relacionado con el uso de drones y su manejo profesional, lo recomendable es que tu equipo y tú seáis poseedores de todas las acreditaciones profesionales para operar en este campo.
Estudia bien el mercado al que te enfrentas y el fin profesional de tu negocio, ya que actualmente ya se habla de una saturación del sector y de que se trata de una actividad profesional secundaria.
Si pilotar drones es tu hobby preferido y estás deseando tener tiempo libre para usarlos, no lo dudes y disfruta de todo lo que vas a aprender obteniendo la licencia.
Recuerda que si usas tu drone como aficionado y de forma lúdica, su empleo también está regido por ciertas normas de seguridad que debes conocer, cumplir y ser consciente de que estos dispositivos no son juguetes.